DAVID SANTIAGO TOVILLA
DIARIO POPULAR ES!
La película es dirigida por Zhang Yimou. Presentada en cartelera como La historia de Qiu Ju y titulada en la película como: Qiu Ju, una mujer de China.
El filme aporta una reflexión sobre el proceder y los
empeños humanos. La anécdota narra un modo sencillo el empeño de una mujer, Qui
Ju, por conseguir una explicación digna por una ofensa de la autoridad.
La protagonista vive en una aldea lejana a los centros
urbanos de China. Su marido, Wang, ha sido golpeado en los genitales por el
alcalde del lugar. La pareja quiere construir un espacio habitacional. No es
posible por ser tierras de cultivo.
Wang hiere moralmente al alcalde, al ironizar sobre su
descendencia estrictamente femenina. Las tradiciones orientales estipulan herederos
varones. El aludido ya no lo tendrá porque tiene seis hijas y los problemas de
explosión demográfica no le permiten cualquier intento para obtener un varón.
Qiu Ju informa que el alcalde arremetió a golpes a Wang.
Es la autoridad dice, no puede permitir que construyan, pero tampoco tiene
derecho a golpear a la gente. Por tanto, todas las acciones de ella y sobre las
cuales gira la película será para buscar que éste reconozca haber cometido un
error.
Había que conocer exactamente las dimensiones que adquieren
los actos de Qiu Ju, en su sociedad. Posiblemente sea algo inusitado el empeño, la
persistencia ante todas las instancias por resarcir, de este modo, el daño
hecho. Porque, aunque ella no se explica bien y ante muchas de las actuaciones
y decisiones de la gente urbana, nunca desiste. El desenlace de los hechos
demuestra la psicología de la autoridad, nunca dispuesta a reconocer sus equívocos,
aunque existan algunas personas que estén dispuestos a hacerlo mediante ciertos
actos.
Paralelo a la salida de Qiu Ju hacia los lugares de
residencia del poder judicial, hay algunos elementos. La occidentalización en
la manera de vestir, del pueblo chino. La mentalidad anti solidaria y
aprovechadora que existe aún después de la experiencia del socialismo. El hecho
de que éste sea uno más de los factores ya no el principal y que llevan, por
ejemplo, a ser el afiche del dirigente de la Revolución, Mao, uno más entre
muchos y en los cuales hay más figuras de la industria cinematográfica
estadounidense.
Así, Ju acude primero ante la municipalidad, después
ante la instancia regional; enseguida es la visita al director de la Policía
Nacional. La respuesta es la misma y todos van convalidando la anterior:
pagarle los gastos médicos y los días perdidos por inhabilitación. Pero ella
insiste en una disculpa. La respuesta del alcalde también es la misma. Entregar
el dinero, pero decir que es parte de la autoridad. Qiu Ju acude ante la máxima
instancia: el Tribunal.
Mientras, ella ha dado las vueltas a pesar de su
pronunciado embarazo. Da a luz, pero no puede aliviarse con la ayuda de métodos
caseros. Padece hemorragia. Requieren la ayuda del alcalde, quien organiza un
grupo y participa en el traslado de la mujer, en una rústica camilla. Wang
promete olvidar el incidente. Él se ha reivindicado de esa manera, en el fondo,
aunque 1o niegue diciendo que lo ha hecho como "uno de muchos
partos".
Al mes, la pareja organiza un festejo por el
nacimiento. La misma Qiu Ju demuestra su interés por contar con el alcalde en
esa fiesta. Va a invitarle personalmente. Al principio se niega, después
promete pensarlo. El día indicado, su familia se adelanta, él ha quedado
alistándose para asistir.
En medio del jolgorio llega el agente Li.
Desafortunadamente va a notificar su fallo: el Tribunal, al revisar la
radiografía que ordenó en su momento, encontró una lesión interior en Wang;
cambia la situación y se determinan quince días de prisión para el alcalde. Al
mismo tiempo, le dice, la policía está deteniéndolo. Ella expresa: "solo
quería una explicación". Corre a la casa de aquel. No lo alcanza. La
película finaliza con un encuadre de ese rostro sorprendido y angustiado.
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