México: quinto país en el mundo en consumo de videos sexuales, en 2022

DAVID SANTIAGO TOVILLA

Fotografía: 李大毛 没有猫

México es el quinto país en el mundo en consumo de videos sexuales revela el estudio The 2022 Year in Review. Desde el año 2013, PornHub difunde, en el mes de diciembre, los datos analíticos de los consumos mundiales durante los once meses anteriores.

El primer informe del departamento de estadísticas de la empresa canadiense se limitó a enumerar, de manera somera, los hallazgos. Con los años, se ha convertido en un ejercicio detallado que permite observar los cambios del consumo de audiovisuales sexuales. En el seguimiento, puede observarse cómo México pasó del décimo lugar, en 2014, al número cinco en la escala de los consumidores. En 2022, sólo le superan Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Japón. Con relación al año anterior, desbancó a Italia en la posición que ahora ocupa.


El estruendoso, avasallante y omnipresente mundo de los videos centrados en la genitalidad es una de las características del siglo XXI y el resultado de la masificación de dispositivos tecnológicos.
The 2022 Year in Review lo confirma en uno de sus bloques: «En 2022, los dispositivos móviles representaron el 87% de todo el tráfico». En específico: el 84% se realiza desde teléfonos y el 3% en tabletas, frente a un 13% que aún utiliza las computadoras. En México, el consumo videosexual se hace en un 92% del total desde los celulares. Sólo superado por Filipinas en donde llega a 94%.

Por eso, más que emitir un calificativo hay que estudiar, conocer el fenómeno y situarlo en su dimensión. Hacerlo, con las herramientas de datos actuales a disposición, permite ver cómo la afición al consumo de videos de sexo se relaciona con la vida cotidiana y los referentes de las personas.

 

Merece observarse el contexto en que ocurren las búsquedas que lo definen cada año. Por ejemplo, en 2021, aún prevalecían las restricciones de la pandemia del COVID-19 y las secuelas de una vida confinada. La gente buscó videos genitales relacionados con: «romanticismo, «sexo en grupo», «forma física o fitness», «intercambio» y «challenge o desafíos».

 

En 2022, con la recuperación de la libertad total, las búsquedas son diferentes. Es muy significativo que, ahora, la cuarta mayor búsqueda en el mundo sea «outdoors o al aire libre». El documento lo consigna así: «creció un +121% y se sumó al Top 10 a nivel mundial. Fue una de las 10 categorías principales en 19 o nuestros 20 principales países con mayor tráfico». Quieren ver las prácticas sexuales en espacios abiertos, ventilados, públicos, opuestos al encierro.

 

La número uno fue «realidad». Buscan una experiencia distante de las actuaciones para concentrarse en expresiones con mayor naturalidad y autenticidad. Ya tuvieron más de dos años de fantasear y suponer. Es tiempo de aterrizar todo. 

 

Las búsquedas actuales poco se acercan a las del año anterior. Ahora, reflejan activismo, movilidad: el deseo de observar «posiciones» sexuales está en quinto lugar.

 

El sexto sitio es para los pies: «Las búsquedas de Love Her Feet fueron tendencia durante todo el año, lo que convirtió a foot en el término relacionado con fetiches más popular en 2022. La categoría Pies fue vista un 38 % más que el año anterior, lo que incluyó un aumento de popularidad del +145 % entre mujeres, y +10% para hombres». Recuérdese un artículo dedicado el tema, en este espacio, en agosto pasado.

 

El análisis de datos es amplio: preferencias, edades, generaciones, tiempos, días, sucesos. Hay que ir al enlace, convertirlo en el traductor preferido y dedicarle un rato. Acá sólo se recuperan algunos de ellos, como la coronación de Abella Danger como la mujer más buscada en el mundo. Sus videos alcanzan 1,609 millones 231,086 vistas. Desbancó a Lana Rhoades.



En México, a Lana la mantienen en primer lugar; en segundo y con mucho desfase, continúa Mia Khalifa, una chica retirada desde hace siete años. Acá, a la triunfante Abella la mandan a la cuarta posición.

 

No en todos los países se consume lo mismo, ni tampoco ocurre en las regiones geográficas de una misma nación. Los consumidores también difieren. Por ejemplo, en México la franja central para los videos sexuales es de 18 a 24 años; mientras que en Estados Unidos en quienes tienen de 25 a 34; y, en España en las edades de 45 a 54.



El vínculo entre el consumo audiovisual popular y el de tipo sexual también se refleja en la encuesta: «La fantasía juega un papel importante. La gente no busca simplemente la desnudez; están interesados ​​en los escenarios que conducen a cada encuentro sexual. Es natural que los fanáticos quieran ver a sus personajes de películas favoritos involucrados en escenarios sexuales, por lo que las parodias y el cosplay son géneros populares de películas para adultos.

 

»Harley Quinn siguió siendo la película o el personaje más buscado en 2022, seguido de Star Wars, que duplicó con creces su popularidad respecto al año anterior. Los personajes favoritos de Marvel en orden son Black Widow, Wonder Woman, Avengers y Guardians of the Galaxy. Los personajes favoritos de DC son Batman, Spider Man y Deadpool».

 

No se duda que, en 2023, dentro de los diez personajes más populares esté Merlina o Wednesday Addams por el encumbramiento que le ha dado la serie de Netflix. La recreación sexual que hace de ella Lil Canadian Girl tiene, hoy: 3.3. millones de vistas. Varias cosplays han realizado su imitación, desde hace años, con gran éxito.

 

PornHub ha demostrado, con datos duros y sistematicidad, que el consumo de contenidos sexuales es una realidad contundente, innegable, inocultable. A lo largo de este texto se les ha llamado por lo que son: videos sexuales y no pornos. Calificar algo como pornográfico implica adjudicarle connotaciones, cargas negativas. Bien lo explica Marco Aurelio Denegri: «Así como el único objeto del quitamanchas es quitar manchas, de la misma manera el único objeto de la pornografía es provocar sexualmente. Y así como hay solos de piano o de violín, de la misma manera la pornografía es un solo de genitalidad.

 

»Lo que hay que combatir no es la pornografía, sino la incultura sexual. El verdadero problema no es la pornografía, sino la abismal miseria sexual humana: la ignorancia, los prejuicios, los tabúes, el miedo y la represión».

 

Ojalá no se les tuviera miedo a las palabras y se hablara, con franqueza, de una realidad: México está dentro de los cinco primeros lugares mundiales de consumo pornográfico. Sí, se consume porno y mucho como algo privado, íntimo, que sólo puede revelar PornHub.